Estudiantes en el centro para profesores. Fuente: Misión de Emaús
Estudiantes en el centro para profesores. Fuente: Misión de Emaús
Construcción del centro para profesores. Fuente: Misión de Emaús
Construcción del centro para profesores. Fuente: Misión de Emaús

Problemática Social

El condado del Río Tana, situado al este de Kenia (a sólo 120 kilómetros de la frontera con Somalia), tiene un índice de pobreza muy elevado, con casi el 80% de la población viviendo por debajo del umbral de la pobreza.

En el condado del Río Tana se han detectado los peores resultados de todo el país en los exámenes finales de educación primaria y secundaria.

Hay varias razones que han llevado a estos resultados, aunque un factor determinante es la falta de profesorado cualificado en los centros escolares de la zona.

Nuestra Intervención

Fundación Netri colabora desde el 2015 con la Misión de Emaús de la Diócesis de Garissa, con el objetivo de mejorar la situación de la región por la vía educativa.

Una de las prioridades de la Misión de Emaús es el desarrollo de programas de formación para los niños y jóvenes de la zona, dando oportunidades a los más vulnerables y marginados de la sociedad para cambiar su situación.

Nuestra aportación va dirigida a la construcción de 1 escuela, con 2 aulas y 1 sala de profesores, para impartir clases a los jóvenes que quieren formarse como profesores de educación infantil.

En el distrito del Río Tana hay muy pocos profesores de educación infantil. Además, no existe ninguna escuela que esté ofreciendo una enseñanza similar.

A causa de esto, el curso ya está homologado por el Ministerio de Educación de Kenia, y los certificados obtenidos servirán a los nuevos profesores para poder trabajar en cualquier escuela de Kenia.

Impacto Social Esperado

Los beneficiarios directos serán los jóvenes que hayan acabado la escuela secundaria, optando por ser profesores y matriculándose en la nueva escuela. La capacidad de la escuela es de 60 estudiantes.

La selección de candidatos se realizará con la ayuda de las autoridades locales y se priorizarán a los jóvenes más necesitados y vulnerables: los que tengan más carencias, sean huérfanos, tengan madres con VIH/Sida o estén sin trabajo. La mayoría de estos jóvenes pertenecen a la etnia Pokomo, aunque también los hay de otras etnias como la Orma, Kikuyu o Kamba. Se dará prioridad a las mujeres.

Se espera que la población de la zona también se beneficie, porque los niños tendrán profesores bien formados en sus escuelas. La expectativa es que muchos de los jóvenes se queden después de formarse, asumiendo puestos de trabajo en los parvularios y escuelas primarias de la zona.