Una familia en su nueva vivienda en el pueblo de Hanumanthanahalli. Fuente: Fundación Vicente Ferrer
Una familia en su nueva vivienda en el pueblo de Hanumanthanahalli. Fuente: Fundación Vicente Ferrer
Vivienda nueva en el pueblo de Hanumanthanahalli. Fuente: Fundación Vicente Ferrer
Vivienda nueva en el pueblo de Hanumanthanahalli. Fuente: Fundación Vicente Ferrer
Vista de una casa en la colonia de 14 viviendas en Hanumanthanahalli. Fuente: Fundación Vicente Ferrer
Vista de una casa en la colonia de 14 viviendas en Hanumanthanahalli. Fuente: Fundación Vicente Ferrer
Interior de una casa en la colonia en en Hanumanthanahalli. Fuente: Fundación Vicente Ferrer
Interior de una casa en la colonia en en Hanumanthanahalli. Fuente: Fundación Vicente Ferrer
Placa en las viviendas de la colonia en Hanumanthanahalli. Fuente: Fundación Vicente Ferrer
Placa en las viviendas de la colonia en Hanumanthanahalli. Fuente: Fundación Vicente Ferrer

Problemática Social

Aunque la Constitución india de 1950 establece que nadie será discriminado por su casta, la realidad para los “dalits”, la más humilde de la India, es bien distinta. Viven en condiciones de pobreza extrema y sufren una gran desigualdad económica y discriminación social.

Especialmente grave es la situación que sufre la población infantil. Un alto porcentaje de niños y niñas dalit no asiste a la escuela o la abandona antes de acabar primaria, con lo que se ven forzados a trabajar en la calle o practicar la mendicidad. En el caso de las niñas es incluso peor, pues ser mujer dalit conlleva una triple discriminación por casta, clase y género. Con la idea de hacer frente a esta situación se realiza este proyecto de construcción de viviendas, para conseguir así dignificar y mejorar la calidad de vida de todas estas personas.

Nuestra Intervención

El proyecto se centra en la construcción de una colonia de viviendas con el objetivo de reunir las condiciones necesarias de salubridad, higiene y seguridad para todos los beneficiarios. Dichas viviendas, construidas con la colaboración de toda la comunidad beneficiaria, representan un antes y un después para sus inquilinos ya que suponen un refugio eficaz en los meses de lluvias monzónicas (de junio a octubre), un amparo frente al intenso calor en la época pre-monzónica gracias al porche del que disponen, y una protección contra las picaduras de animales peligrosos como son las serpientes y los escorpiones.

Impacto Social Esperado

Esta donación beneficiará a 14 familias. Es importante señalar que el poseer una vivienda digna influye en gran manera en la autoestima de los beneficiarios y contribuye a incrementar su sentimiento de pertenencia a una comunidad. Como consecuencia de todo ello crece su implicación en las tareas cotidianas, lo que significa que las familias adquieren el compromiso de llevar a sus hijos e hijas a la escuela, acuden a los servicios sanitarios sin miedo y en definitiva, su calidad de vida mejora.